Para eliminar una cláusula que les impide acceder a los cargos de conducción partidaria, intendentes bonaerenses del radicalismo salieron a fogonear en las últimas horas una modificación de la carta orgánica de la UCR de forma tal que cualquier afiliado pueda presidir el Comité Provincia. La jugada tiene como protagonista al jefe comunal de Junín, Mario Meoni, quien ya se anotó en la carrera para suceder al platense Miguel Bazze al frente de ese órgano de conducción partidaria del radicalismo provincia.
Quien salió a pedir esa modificación fue la diputada provincial de la UCR Valeria Arata, una de las espadas políticas de Meoni en la Legislatura, quien pidió modificar la Carta Orgánica del radicalismo provincia, que impide ser candidato a los cargos partidarios a concejales, intendentes, diputados y senadores.
Arata pide cambiar el texto de forma tal que cualquier afiliado a la UCR pueda presidir el Comité Provincia. “La UCR debe dar la posibilidad a aquellos que fueron votados en las elecciones generales a que también puedan ser elegidos en el elecciones partidarias”, dijo la legisladora.
El planteo de Arata busca tomar como antecedente la excepción que habilitó la Convención del radicalismo para que el actual presidente del Comité Provincia, Miguel Bazze, pueda presentarse, como lo hizo, como candidato a diputado nacional. “Creemos que debe haber una reforma o una excepción más amplia para que todos los afiliados puedan ser candidatos”, dijo Arata, quien también agregó que “la fortaleza del radicalismo, hoy más que nunca, radica en pocos territorios de la provincia donde se pudieron mantener las intendencias”, en clara referencia a Junín. “Esos dirigentes son los que tienen mayor respaldo de sus vecinos y mayor visibilidad ante la sociedad en general y la prensa”, manifestó.
Es justamente sobre el cargo de Bazze sobre el que Meoni mantiene aspiraciones. De hecho, Arata reconoció ayer que los equipos políticos del reelecto jefe comunal de Junín trabajan “desde hace varios meses” en su candidatura. “Tenemos representatividad en muchos municipios del interior de la Provincia, como así también en las dos secciones del Conurbano y estamos charlando con dirigentes de La Plata”, apuntó.
La candidatura de Meoni sumó algunos rechazos entre sus pares, como el intendente de Nueve de Julio, Walter Battistella, quien criticó el perfil del juninense, pero también alguna competencia.
Ayer, el que pareció dejar expuesta su aspiración fue el intendente de San Isidro, Gustavo Posse, quien, como Meoni, salió al ruedo a través de sus espadas legislativas. El senador de la UCR Roberto Costa, que integra el sector político de Posse, salió a formular declaraciones en las que subrayó que el partido debe dar protagonismo “a quienes han sido exitosos intendentes ratificados por el voto de sus vecinos”.
Costa, vicepresidente Segundo del Senado, resaltó además que el partido “debe esforzarse en generar un cambio de mentalidad. Recuperar la vocación de poder para cambiar lo que no está bien, apuntalar lo bien hecho o concretar lo que falta”.
En esta línea, entendió que “es importante, en este caso, el protagonismo de quienes han sido exitosos intendentes ratificados por el voto de sus vecinos, pero esto no garantiza automáticamente ser un buen dirigente partidario”.
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